El hallazgo se dió en las calles María Teresa Rojas y Volcán Arenal, al suroriente.
Se dijo que el cuerpo lo tenían oculto en una casa, de ahí tres personas lo subieron a un carrito para deshacerse de el.
Lo llevaron hasta una alcantarilla donde intentaron meterlo pero como estaba muy hinchado no pudieron y ahí lo dejaron.
Sin embargo, los responsables dejan manchas de sangre que marcan el camino hasta la casa donde lo tenían escondido.